Ya es suficientemente difícil para algunos propietarios continuar pagando su hipoteca y los gastos que conlleva la casa. El coste de los gastos de servicio público (agua, luz, gas…) puede ser una de las cosas más difíciles de llevar. Pero no tienen por qué. Haga uso de las siguientes sugerencias para reducir sus gastos del hogar.
- Muchas compañías ofrecen inspecciones y boletines de información de cómo ahorrar en el hogar gratuitamente o por un bajo costo. Hable con las compañías locales para aprovechar estos servicios.
- Cambie las horas en las que hace cosas en la casa puede ayudarle a reducir sus recibos. Hable con su compañía local para ver cuáles son las horas punta. Trate de no hacer funcionar la lavadora, el lavavajillas, el horno o la secadora durante estas horas.
- Ahorre agua reduciendo la temperatura del calentador de gas y reduciendo la presión.
- Si sus grifos o llaves gotean, arréglelos. Una gota cada segundo hace que al año se pierdan 2,700 galones de agua.
- Cuando cocina, trate de usar el microondas en lugar del horno. Los microondas gastan un 50% menos de energía que los hornos.
- Apague las luces cuando no las use. Cambie sus focos o bombillas a aquellas que ahorren energía.
- Si está pensando en comprar una lavadora, considere una que sea “front-loading”. Puede que sea un poco más cara pero utiliza un 50% menos de energía y un tercio del agua. Centrifugan mucho más, lo que significa que el tiempo que las prendas necesitan de secado es mucho menor. Así también ahorra electricidad.
- Apague su computadora cuando no la use o póngala a hibernar.
- Arregle las ventanas que tengan ranuras o fisuras. Pueden ahorrarle un 15% en costos de calefacción o de aire acondicionado. Si es posible, ponga ventanas dobles.
- No deje el agua correr cuando se cepille los dientes, se afeite o lave los platos.
- Desenchufe los aparatos que no utilice.
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- invierta en un sistema de luz con sensor para afuera. De este modo no tendrá que dejar las luces prendidas todo el tiempo.
- Ajuste su termostato para por la noche; considere el uso de una manta eléctrica durante el invierno y un ventilador de pie durante el verano.
- Si no hay nadie en casa durante el día, considere el comprar un termostato programable. Prográmelo para que funcione media hora antes de que la primera persona llegue a casa.
- Haga llamadas de larga distancia cuando las tarifas sean más bajas, normalmente por las tardes o los fines de semana.
- Dese de baja de los extras del teléfono, como llamada en espera, identificador de llamada, etc.
Reduzca sus gastos del teléfono celular. Todos sobrevivimos cuando no existían hace solo algunos años.
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